El certamen se realizará desde el 24 al 31 de agosto en Pamplona-Iruña, España. El sanvicentino competirá en las especialidades de pala corta y paleta cuero. El viaje al viejo continente está programado para el 21 de agosto.
San Vicente | Del 24 al 31 de agosto se realizará en Pamplona-Iruña (España) el XI Campeonato Mundial de Pelota Vasca, y el pelotari sanvicentino Patricio “Pato” Peloni formará parte del Seleccionado Nacional de ese deporte. Peloni participará en dos especialidades de la pelota vasca: pala corta y paleta cuero en 36 metros.
La ciudad de Pamplona, acoge por primera vez la celebración de un Campeonato del Mundo de Pelota Vasca Sub-22 desde su primera edición en 1984. La capital de la provincia española de Navarra se une a Arnedo, Soria, Valdepeñas, Barcelona, Palencia, Santa Cruz de Tenerife, Íscar y Valleado; las ocho ciudades españolas que han albergado esta cita internacional en sus modalidades de frontón de 30 metros, 36 metros, 54 metros o trinquete.
Este torneo supone uno de los grandes escaparates internacionales para los jóvenes talentos de este deporte. Pamplona-Iruña, y en especial el prestigioso Frontón Labrit (lugar donde se desarrollará el certamen), capitalizarán por unos días la universalidad de la pelota vasca, sus valores y el espíritu de un deporte autóctono del País Vasco.
El “Pato” Peloni integrará la Selección Argentina junto a Santiago Markel, Camilo Candal, Bautista del Río, Laureano Caló y Uriel Arredondo. El joven deportista local participará en las especialidades de pala corta (una paleta de un kilogramo) y paleta cuero (una pala de 600 gramos, aproximadamente).
La pala corta es una modalidad del juego, cuya herramienta es una paleta de madera. Esta modalidad se disputa en frontones de 36 metros y por parejas. La paleta que se utiliza suele ser de madera de haya, está fabricada de una sola pieza. La pelota por su parte es de cuero, de mayor grosor y diámetro que en paleta (trinquete).
El viaje de la Selección será el miércoles 21 de agosto, y a su llegada tendrán unos días para su adaptación a las canchas del Frontón Labrit. Mucha suerte y traé una pata de jamón.